El Teatro Pereyra, uno de los locales más emblemáticos de las noches de Ibiza gracias a su apuesta decidida por la música en directo, que ofrecía cada noche durante todo el año, ha cerrado sus puertas definitivamente. Una triste noticia que aunque ya se conocía desde hacía tiempo, deja un regusto amargo al tener que decir adiós después de 30 años a un local de referencia en la isla.
La noche del sábado 3 de marzo de 2018 tuvo lugar una emotiva fiesta de despedida que no se publicitó ni siquiera en las redes sociales del propio café concierto, y que a pesar de darse a conocer a través del boca a boca congregó a toda una multitud de clientes, artistas, amigos y muchos rostros conocidos que se acercaron a mostrar su cariño. Fueron tantos los asistentes, y eso a pesar de la fina lluvia que caía, que poco después de la medianoche tuvieron que agolparse en la terraza, en las calles cercanas y en los alrededores del icónico edificio.
Como no podía ser de otra manera, la velada estuvo protagonizada por la música, con la Matteo Crocetti Band y otros músicos habituales del local interpretando grandes éxitos de la historia del rock, soul, pop, funky o la música latina que han sido la banda sonora habitual de este local cuyo lema era “sin VIPs ni privados”.
Y es que este local, abierto en los 80 por una familia holandesa, con el pianista y compositor Eric-Jan Harmsen al frente, su hijo Juan Guillermo Harmsen ‘Juangui’ y su madre, Kees Terbruggen, ha sido una parte esencial de la historia de Ibiza, un lugar donde muchos hemos vivido un sinfín de noches mágicas e irrepetibles con la música de calidad como telón de fondo.
Desde el domingo el local vuelve a manos de la familia Matutes, propietaria del teatro. Lo que se hará a partir de ahora con este edificio, declarado Bien de Interés Cultural, todavía no se conoce. De lo que no hay duda es de que este cierre marca el fin de una época, o, como de forma tan emotiva expresó Juangui, el hijo del dueño, es el final de “un sueño que ha durado 30 años“. Su madre Kees, añadía: “Estamos tristes pero muy felices a la vez porque cuando una puerta se cierra, otra se abre“.
GRACIAS FAMILIA TEATRO PEREYRA IBIZA POR TANTO, TANTOS AÑOS…
