El pueblo de San Miguel está situado al noreste de la isla, en el municipio de San Juan. Es uno de esos rincones de Ibiza alejados del ruido y el bullicio. El centro del pueblo está compuesto únicamente por algunos comercios, bares y restaurantes, casas típicamente ibicencas y algunos edificios de viviendas.
Como no podría ser de otro modo, lo que más llama la atención de este lugar es su preciosa iglesia fortificada. Sus paredes encaladas resplandecen sobre el Puig de Missa, la colina en la que está situada. El hecho de que date del siglo XIV la convierte en una de las parroquias más antiguas de Ibiza. En el siglo XVI se construyó la nave central, a la que posteriormente se le sumaron dos capillas.
Fuera del templo existe un bonito mirador en el que se encuentra la estatua del poeta ibicenco Marià Villangómez. Muy peculiar es también el estanco de Can Xico de sa Torre, un pequeño bar y estanco que se mantiene intacto al paso del tiempo. Fundado en 1905, era el punto donde se daban cita los habitantes del pueblo.
Son varios los artistas que abrieron sus talleres en las callejuelas que conducen hasta la iglesia. Conocidos artesanos como Darío Bome, maestro del cuero, o el orfebre italiano Alberto Citterio trabajan y venden sus creaciones aquí.
El núcleo turístico más importante es el puerto de San Miguel, una de las zonas más concurridas del pueblo. Una bahía natural que sirve como pequeño puerto y desde el que antiguamente se exportaban productos agrícolas. Era también un lugar frecuentado por contrabandistas que escondían sus mercancías en cuevas como la de Can Marçà. Una gruta con más de 100.000 años de antigüedad ubicada en el interior de un acantilado. Permanece abierta durante todo el año y la visita se realiza de forma guiada.
La playa del puerto es un arenal tranquilo y repleto de servicios, hoteles y buenos restaurantes donde degustar lo mejor de la gastronomía de Ibiza. Si te apetece explorar un poco más la zona, puedes tomar un camino que verás a mano izquierda (mirando al mar) que se adentra por el bosque. Si lo sigues llegarás a la cala de sa Ferradura y desde aquí verás s’Illa des Bosc, un islote privado con una enorme casa de lujo. No te llevará más de quince minutos a pie.
Cerca de el puerto de San Miguel hallarás también calas como Benirràs, famosa por sus increíbles puestas de sol, es Caló des Moltons o es Pas de s’Illa.
Cómo llegar
Desde Ibiza toma la carretera hacia Santa Eulalia y, antes de llegar, verás el desvío hacia San Juan. Cógelo y continúa hasta que encuentres el de Sant Miquel.