Seguro que habéis oído hablar de los múltiples beneficios que aporta un baño de barro. La fangoterapia viene usándose desde hace siglos con fines estéticos y curativos. Además de tener propiedades bactericidas y antiinflamatorias, sirve como exfoliante y deja la piel suave y tersa. O eso dicen algunos.
Otros, por el contrario, no ven nada claro esos supuestos efectos casi milagrosos del tratamiento. De hecho, el propio Govern Balear asegura que podrían ser perjudiciales para la salud puesto que los lodos se extraen de aguas estancadas.
Aún con todo, son muchos los aficionados a esta práctica y no hablamos solo de los turistas de a pie. Distintas celebrities, como Paris Hilton, se han dejado fotografiar repletas de barro en Ibiza y quizás recordéis la película ‘Lucía y el sexo’ de Julio Médem ¿Os suena una de sus escenas más célebres? ¿Esa en la que los protagonistas aparecían cubiertos de fango en Formentera?
En Ibiza hay varias calas donde podrás embadurnarte en barros naturales. Solo tendrás que coger una pequeña cantidad, mezclarla con un poco de agua, aplicártela en la piel o incluso en el cabello y dejar que seque durante unos minutos.
Aigües Blanques, Santa Eulalia. De las paredes de sus acantilados se extrae una especie de tierra de color grisáceo que se convierte en barro. Olvídate de manchar tu traje de baño, ¡el nudismo está permitido en esta playa!
Es Bol Nou, San José. Conocida popularmente como Sa Caleta, esta playa de ambiente familiar está delimitada por altos acantilados que desprenden una tierra rojiza que, junto al agua, se convierte en barro.
Cala Xarraca, San Juan. Si caminas hacia la parte izquierda de la playa encontrarás la zona de la que podrás obtener la arcilla. Mézclala con el agua del mar hasta formar una pasta y extiéndela por tu cuerpo.
S’Espalmador, Formentera. Este precioso islote es conocido por ser un lugar paradisíaco y por sus estanques de barro. Es un espacio natural protegido, con lo que debes tener un cuidado especial con el entorno que te rodea.